
ASTRO
Entrevista: Annemarie Gunkel
Fotografías: Victor Zea
"Desde siempre quería ser artista. De niño siempre pintaba y dibujaba pero no creía que se podía tomar como una profesión.
Empecé a tatuar porque quería llevar el arte plástico al siguiente nivel, y porque me di cuenta que de cuadros no iba a vivir.
A mí me enseñó mi hermano, y el primer tatuaje que hice fue a un amigo, le hice un diseño mío."


"El arte que hago es bien urbano y a veces choca con el contexto tradicional y conservador de Cusco.
Pero justamente estos choques son importantes porque te retroalimentan. Yo mezclo elementos urbanos con influencias artísticas de las antiguas culturas andinas. La cosmovisión andina es una fuente muy rica de inspiración.
Para sobrevivir en una ciudad como Cusco hay que saber manejar la mezcla de elementos."
"A Cusco me atan mis lazos sentimentales, mi misma genética, mi madre tiene mucho arraigo aquí, tengo mis amigos.
Desde que llegué, Cusco me atrapó. Al principio no supe entender bien la energía de la ciudad, pero a medida que pasaba el tiempo me fue gustando más y más.
Trabajé en el extranjero también y es bueno compararse con profesionales de otros lados para saber en qué nivel te encuentras.Sin embargo, los viajes también te hacen valorar lo bueno que uno tiene en casa."
