
CAROLINA NIÑO DE GUZMÁN
Entrevista: Annemarie Gunkel
Fotografías: Miguel Palomino
"Crecer con mis abuelos en una casa grande me influyó mucho. Siempre estaba rodeada de cosas muy antiguas, de ropa y objetos y con mis primos jugábamos y nos disfrazábamos. Además, como había tantos espacios en la casa yo me podía escapar e inventarme diferentes mundos.
Creo que de ahí me sale la pasión por crear todo el tiempo, de sumergirme en diferentes realidades."


"Empecé a formarme en Cusco con el grupo "Impulso" de Tania Castro y talleres cómo los de la CASA DARTE. Pero a nivel estatal no hay escuelas. En Cusco hay un movimiento pequeño de artes escénicas y se impulsa poco desde el Ministerio de Cultura.
Además de eso no hay un público acostumbrado a asisitir a eventos culturales. Y no es tanto el factor económico, porque si vas un domingo al Real Plaza está lleno, es un problema de educación. Habría que partir de las escuelas para generar cambios y crear un público que consuma arte."
"Lo que me gusta del teatro es el feedback inmediato del público, te das cuenta si se están creyendo el personaje o no y puedes moldear en el momento.
En el cine eso es diferente, me ha pasado que rodamos una escena donde estaba muy conmovida, llorando y de repente no se me ve la cara. Ahí me dí cuenta que el cine es mucho más que la actuación: es el trabajo de un equipo grande y también hay que saber soltar, dejar que otros hagan y ver qué puede salir de ahí. Es casí como la composición de un cuadro, tú eres simplemente un color más."